Se desata la rabia, cavilar, entorpecer
se avecinan las tardes raras
se juntan las ganas en estrofas
esas raras ganas, ese ventarrón
ese malestar ante todo, confusión venidera
Un poco de lo mismo? Odiar odios del adios
quiero matar eso feroz, esa envidia letal
ese sabor infinito que tantas veces probé
Ahora no soy yo, solo es mi corazón
De que soledad podría hablar?
la vida se ha trastocado, y si no tengo lo que quiero?
la lucha de vivir y de enfrentarla, sus dados ha lanzado
que he ganado? que he sentido?
que he logrado? que he querido?
Sigo esos pasos, amé mi cárcel
planifiqué mi encierro, encendí mi cuerpo
besé a mis enemigos, me congelé entre las ramas
extraño extrañar como se siente ser prendido
extraño a la nada, y a los días ebrio de todo
extraño los días excesivos, la cadencia
el no ver de tanto libar
explicarle al amor que en el creo haber caído
decirle al amor, estoy harto, estoy confundido
Y que la dulce espera, se manche
que desaparezca este demonio de amar sin sentido
que muera ese vínculo
que bailen mis problemas, que se borren mis poemas
que se larguen mis historias, esas que aprendí de memoria
que se mueran los impulsos y las ganas de vivir en el cielo
que termine esa agonía, de sentir, y de esperar
Y que se manchen las calles con la herejía de soñar estar dormido
y repudiar la sobriedad de estar despierto
y arrancar mil veces, y morir cien mil veces
