viernes, 8 de marzo de 2013

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Siempre me molestó cuando se pone en ese plan tan tonto, ambos sabemos como son o como están las cosas, hacer “énfasis” sobre una situación en especifico para mi resulta absurdo e innecesario, en esos momentos prefiero no hablar ni leer nada, neutro puedo reaccionar mejor.

Nunca odie los “celos” es mas me considero una persona celosa, pero he desarrollado cierto comportamiento por el cual puedo caletearme un rato y listo, la verdad así es mejor, pero no soportooo y me llega altamente sus celos nada obvios y esos ratos en que podría hasta medir su nivel de molestia, no se si con justa razón o por algo absurdo, sobre todo cuando se que no tengo que preguntar que esta pasando, porque ya tengo la respuesta, y prefiero hacerme el idiota.

La verdad no entiendo, la acumulación de todos estos ratos van a terminar por volverme mas loco aun, no se trata de entender o no entender a alguien, pero cuando compartes tu vida con alguien, y por instantes transcurren situaciones que al parecer para ambas partes no tienen o no forman una estructura del comportamiento normal, hacerse el de la vista gorda es lo peor, insisto, porque carajo el afán de recalcar y dejar dicho mismo ritual ceremonial una realidad latente que prefiero no afirmar cada segundo, en un abrazo, un correo, o cualquier medio de comunicación, inclusive la gestual si es que existe la palabra; es insoportable, y justo para esos momentos la formula que siempre usaba para entenderla no funcione.

Odio esas circunstancias, en esos momentos ya no puedo predecir o interpretar algo, si lo hago, o si es que lo intento lo único que encuentro son estrellas, pero las estrellas que vez cuando te chocas con una pared, con que argumento pedir una explicación, si todo esta clarísimo, como decirte oye puta madre nunca me vas a decir cuando te pones celosa?

Cuando quieres de verdad a una persona, no solo te preocupas de como esta o como se encuentra, y peor aun si esta persona forma parte de tu día a día, te vez envuelto en una especie de trance, y en un conjunto de situaciones o instantes que te alegran la vida, hay cosas que prefiero no comprobar, esa confusión es un poco extraña, y no puedo preguntar o hacer la aclaración, lo mejor es simplemente dejar pasar todo

La extraño, y así la vea o sueñe con ella, la extraño mas, pero también la odio por sus jueguitos de palabras, y cuando vuelve nuestro vinculo casi filial, no me jodas, eso es la peor sensación del mundo, es una mierda, y no porque quiera tener el cliche de que : porseacaso me encantas, sino por la simple razón, que ella sabe que sucede, he ahí el doble discurso y la ambigüedad pura y latente de la nueva adolescencia, podría pasarme la vida analizando dicho tema, y nunca encontraría respuesta alguna